El Parque Natural de Urkiola es una de las joyas naturales de Euskadi. El contraste entre bosques de abedules y sus agrestes cumbres calizas dibujan un lugar de gran belleza e interés geográfico y paisajístico en el que la mente es capaz de desconectar y valorar cada cosa sin prejuicios ni miedos. 

Entre el imponente macizo de la Sierra de Aramotz destaca Anboto, su cumbre más alta. Según la mitología vasca, en su impresionante pared vertical del lado norte se alberga la cueva de Mari, morada de la Dama de Anboto, personificación de la tierra y reina de todos los genios. 

En el Centro de Interpretación del parque, Toki Alai, podrás informarte de las innumerables opciones de vivir la naturaleza en todo su esplendor.

 

Déjate llevar por sus muchos recorridos, rutas a pie y en BTT (bicicleta de montaña), entre sierras y peñas calizas, barrancos y valles profundos.

 

Si lo tuyo es la escalada, recibirás la llamada de las escarpadas paredes de Astxiki y Untzillatx.

En el bosque de hayas, fresnos y abedules que corona el alto se encuentra el Santuario de Urkiola, erigido en honor de San Antonio Abad, patrón de los animales, y San Antonio de Padua.

 

Se trata de una obra inconclusa de estilo neo-romántico de finales del Siglo XIX. Junto a ella, aún se conserva la torre de 1870 de la anterior iglesia.